DIPLORAMA 86
Así no solo detenemos a Trump, sino también al próximo. Donald, ya que sé que estás mirando, tengo cuatro palabras para ti: ¡sube el volumen!
Zohran Mamdani | Alcalde electo de Nueva York
Edición N° 86
Desde la inesperada victoria socialista de Zohran Mamdani, hasta el estremecedor asesinato del alcalde mexicano Carlos Manzo y la muerte de Dick Cheney, artífice de la “guerra contra el terror”, tres historias revelan un mismo hilo conductor: la lucha por el poder, la justicia y la seguridad.
La nueva cara del socialismo estadounidense

Luka Santiago Cuellar

A diferencia del resto de América, y de Estados Unidos, Nueva York optó por un alcalde socialista. Zohran Mamdani fue electo este 4 de noviembre con el 50,4% de los votos. El dirigente, de tan solo 34 años, crítico del genocidio en Gaza, se convirtió en el primer musulmán socialista demócrata en gobernar la ciudad y, sorprendentemente, tuvo un gran apoyo de la comunidad judía de NY. Es así que, nos encontramos frente a una reconfiguración del mapa político en la ciudad.
Las promesas de su gestión se basan principalmente en poder resolver las necesidades básicas de las personas, alegando que va a facilitar el acceso a un alquiler propio, a mejorar el transporte público y hacerlo gratuito, a implementar servicios de cuidado para los hijos de los ciudadanos de Nueva York, que va a aumentar los impuestos a los ricos y a las empresas, entre otras cosas. Sin embargo, para poder llevar a cabo este plan de gobierno, hay que acceder a financiación y a un equipo de talentos adecuado, y esa es la parte en la cual su gobierno no se ve favorecido aún.
Frente a su victoria, el presidente Donald Trump, lo ha catalogado como un “comunista” y como el camino hacia el declive de NY, por lo cual, Mamdani ha salido a aclarar que no es comunista, ya que se lo había comparado con Nicolás Maduro, a lo cual respondió que el pueblo venezolano vive en una dictadura y que Maduro va en contra de la libertad en todos sus sentidos, haciendo hincapié en que su gobierno no apoya ni posee las mismas ideas.
La figura de Mamdani al poder simboliza el cansancio de la población frente a un sistema político estadounidense cada vez más cuestionado por su funcionamiento. El desafío ahora consiste en transformar esas promesas en resultados concretos. Deberá equilibrar sus ideales socialistas con las dinámicas pragmáticas del poder local y la presión de los sectores económicos a los que ha criticado. Su capacidad para sostener ese equilibrio marcará si su caso es una excepción o el inicio de una nueva era en la política estadounidense.
Para saber más, te recomendamos las siguientes lecturas:
- A Good Night for Democrats | The Daily
- Independent Thinking: Mamdani won in New York. For Trump, was it a setback or backlash? | Chatam House
- 5 things we learned about Zohran Mamdani | POLITICO
Uruapan llora y México calla

Iker Escobar León

La violencia política en México se ha vuelto desafortunadamente un tema recurrente en el país; la delincuencia y la corrupción se han vuelto sinónimo. Sin embargo, el país se ha alzado en solidaridad ante el último caso de inacción gubernamental, tras el asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo.
México se estremeció tras el magnicidio del alcalde michoacano, en vísperas del Día de Muertos. La noche del sábado 1, el regidor se encontraba en la plaza pública, en medio de celebraciones locales, cuando fue asesinado. El incidente rápidamente estremeció a la comunidad local y nacional, hecho que resonó también en los medios internacionales. Carlos Manzo destacó por su férrea lucha contra el narcotráfico y sus críticas contra la corrupción, mismo quien denunciaba el abandono del gobierno estatal y federal en el combate de la delincuencia organizada.
Su asesinato provocó indignación en Michoacán, traduciéndose en paro de actividades, protestas y acusaciones en contra del gobierno oficialista. Por su parte, la presidencia se ha pronunciado, condenando el ataque, con la implementación de un nuevo plan de seguridad y el envío de activos de la Guardia Nacional y fuerzas del orden.
La lucha de Manzo no ha sido abandonada. El pasado miércoles 5, Grecia Quiroz —viuda de Manzo— fue abanderada como la nueva alcaldesa de Uruapan hasta 2027, quien ha prometido mantener su lucha. Quiroz fue respaldada por el Movimiento del Sombrero, iniciativa creada en 2024, tras la toma de protesta de Manzo, compuesta por compañeros y activistas simpatizantes del alcalde. El magnicidio convocó a la solidaridad del pueblo mexicano, fortaleciendo la lucha del regidor en contra del crimen y la corrupción. La imagen del alcalde perdurará como la de un líder valiente que nunca dudó en defender a su gente.
Mientras tanto, te invitamos a leer nuestras recomendaciones:
- ‘Estamos contigo, Grecia’: Viuda de Carlos Manzo es elegida como alcaldesa de Uruapan | El Financiero
- ¿Quién es Grecia Quiroz, la viuda de Carlos Manzo que lo sucede como alcaldesa de Uruapan, México? | CNN México
- Un alcalde asesinado, un presunto atacante abatido y la sombra del crimen en Michoacán: qué sabemos del caso de Carlos Manzo | CNN México
Muchas batallas, una misma guerra

María Candela Molina

El fallecimiento de Dick Cheney trae memorias de las épocas el donde el terrorismo era la amenaza más temida. Cheney fue el cuadragésimo sexto vicepresidente de Estados Unidos, sirvió junto al presidente republicano George W. Bush durante dos periodos entre 2001 y 2009. Fue, además, el principal arquitecto de la “guerra contra el terror” y defensor acérrimo de la detención de sospechosos de terrorismo en la prisión de Guantánamo. Hoy, Washington condena a presuntos nuevos enemigos pero en la denominada “guerra contra el narcotráfico”. La pregunta que despierta dudas es: ¿no se trata de la misma guerra?
La figura de Cheney se situaba en el ala dura y conservadora del partido republicano. En sus últimos años quedó prácticamente marginado por sus fuertes críticas al presidente Donald Trump y por su voto en 2024 en favor del partido demócrata, representado por Kamala Harris. A pesar del giro político hacia el final de su carrera, durante su mandato, el ex vicepresidente veló por la defensa de los intereses estadounidenses a través de una retórica marcada por la realpolitik y el hard power.
En este sentido, el objetivo principal fue proteger la razón de estado estadounidense acudiendo al realismo y pragmatismo por encima de las afinidades políticas o morales. Percibía que la seguridad nacional sólo podía asegurarse haciendo uso del poder militar. Bajo este marco, el segundo mandatario impulsó la invasión a Afganistán para capturar a los afiliados a Al Qaeda y presionó para ampliar la ofensiva a Iraq y a su líder, Saddam Hussein.
En la actualidad, se observa la misma línea discursiva en la actividad política de Trump. Estados Unidos vuelve a manifestar sus intenciones intervencionistas, esta vez en el Caribe Latinoamericano, y las premisas que gobiernan la estrategia se vinculan a la lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, detrás de la pluralidad de clasificaciones utilizadas para designar a los enemigos, el trasfondo es el mismo. Washington busca derrocar a gobiernos que amenazan sus objetivos a través de una retórica de seguridad que habilite al ejecutivo a obtener una mayor autonomía del Congreso y poderes extraordinarios.
En definitiva, el gendarme planetario lucha por conservar su posición y muestra su poder por medios duros. La historia ha demostrado ser cíclica y, con contemporaneidad cada vez más hostil, Estados Unidos se resiste a permitir la desconfiguración del orden impuesto. “Habré perdido una batalla, pero no la guerra.” dijo Napoleon Bonaparte hace más de dos siglos. La pregunta no debería ser quién ganará esta batalla sino, ¿cuándo llegará el final de una guerra eterna contra cualquiera que se interponga a los intereses del Norte?
Si querés seguir de cerca esta curiosa amistad te sugerimos el siguiente contenido:
Securitización
A lo largo de este DIPLORAMA, dos muertes y una victoria política reactivaron un debate clave sobre el poder del miedo en la política internacional: la muerte de Dick Cheney, el arquitecto del paradigma securitario global; el asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo, reflejo de la violencia estructural en México; y el triunfo del progresista Zohran Mamdani en Nueva York, símbolo de resistencia frente al discurso antiinmigrante del trumpismo.
Estos hechos, tan distintos entre sí, confluyen en un mismo diploconcepto: la securitización. Formulada por la Escuela de Copenhague, esta teoría explica cómo los Estados transforman un asunto político —terrorismo, drogas o migración— en una amenaza existencial. Al hacerlo, desplazan el debate democrático hacia el terreno de la urgencia y la excepción, donde todo se justifica en nombre de la seguridad.
Tras los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, Cheney elevó el miedo al rango de doctrina. La vigilancia masiva, las invasiones preventivas en Medio Oriente y la excepción como norma redefinieron el orden internacional bajo la lógica binaria “ellos o nosotros”. Años después, la “guerra contra el narcotráfico” en México replicó esa narrativa, convirtiendo la violencia criminal en un enemigo total y militarizando la vida civil en nombre de la paz.
Durante la presidencia de Donald Trump, la migración se convirtió en uno de los nuevos objetos de securitización estadounidense, imponiendo muros, detenciones masivas y discursos que equiparan movilidad humana con amenaza. Sin embargo, la victoria de Zohran Mamdani, hijo de migrantes y defensor de la democracia socialista, simboliza la respuesta a ese miedo institucionalizado y la posibilidad de construir seguridad desde la inclusión y no desde el control.
La securitización no solo es una teoría, sino una advertencia. Quien define la amenaza, define también los límites de la libertad. En tiempos donde el miedo se ha vuelto un recurso para la retórica política, la pregunta vuelve a ser la misma: ¿podemos sentirnos seguros con gobiernos que promueven la excepción para establecer la paz?
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- Repensar la seguridad: Buzan y la Escuela de Copenhague por Estanislao Molinas
- Cuando la seguridad internacional cambió por Luca Nava

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