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DIPLORAMA 84

«La ONU es una promesa viva, que trasciende fronteras, une continentes e inspira a generaciones»

António Guterres

Edición N° 84

Entre cancilleres que duran menos que un café en Balcarce 50, protestas con ritmo de carnaval en Washington y anexiones que se votan como si fueran rebajas de temporada, el tablero global parece más un reality político que un mapa de poder.

Desde Diplomacia Activa, brindamos por aquellos que trabajan para mantener al mundo atento.

¡Feliz día Internacionalistas!


Diplomacia Opacada

Luca Nava

La renuncia de Gerardo Werthein al frente de la Cancillería el pasado miércoles debe ser interpretada no como un hecho aislado de desgaste político, sino como una rasgo sistemático de la gestión Milei, caracterizada por desarticular estructuras burocráticas heredadas y reajustar el equipo de gobierno a la velocidad y a la directriz de su ideología; un esquema donde se prioriza la lealtad y la alineación inmediata sobre la experiencia o la continuidad institucional. 

Su salida luego de una brevísima labor como canciller, se convierte en la segunda en dos años, luego de la de su predecesora Diana Mondino. La exministra dejó de ejercer en octubre de 2024, en consecuencia del voto de Argentina en la Asamblea General de la ONU a favor de la resolución que condenaba el bloqueo contra Cuba. Si bien el caso de Mondino fue un poco mas grave por contradecir la clara línea ideológica enarbolada por el gobierno, ambas eyecciones demuestran un patrón en el que la política exterior, para la administración actual, es un asunto personal del Presidente, y el Canciller debe ser, ante todo, un ejecutor político leal al mensaje del Líder, más que un gestor diplomático técnico. 

El objetivo de Werthein una vez dentro de cancillería fue estabilizar las relaciones con Washington. Había servido previamente como Embajador en Estados Unidos y tuvo un rol muy importante en acercar la figura del presidente Milei a la del primer mandatario estadounidense Donald Trump. También fue presa de desaciertos que tensaron su relación con los círculos diplomáticos argentinos, la más significativa fue la decisión de cerrar la entrada de nuevos aspirantes al Instituto del Servicio Exterior de la Nación para 2025, profundizando la idea de que se busca desmontar las estructuras profesionales del Servicio Exterior.

Su dimisión se da en un contexto electoral, apretado por las sensaciones de inestabilidad gubernamental. El Presidente Milei define lo sucedido como parte del proceso de «reacomodación del Gabinete» para avanzar con la «agenda del futuro», que requiere apoyo legislativo para sus reformas. 

Al día siguiente de los hechos, se confirmó que Pablo Quirno sería el nuevo Canciller de la República Argentina, mano derecha del Ministro de Economía Luis Caputo. Esta elección sello las especulaciones de que el puesto sería ocupado por figuras de alto poder político como Santiago Caputo, asesor presidencial sin un cargo oficial, o por Guillermo Francos, hasta ahora Jefe de Gabinete.  

Con el nombramiento de un funcionario directamente vinculado al Ministerio de Economía, el Gobierno subordina específicamente la agenda diplomática a los objetivos de apertura económica y captación de inversiones, y consolida el patrón de nombrar a ejecutores leales con perfiles específicos. En suma, la destitución a piacere de cancilleres funge como una herramienta de poder que permite al Presidente purgar la resistencia burocrática y asegurar la ejecución de su política exterior centralizada, lo que compromete la capacidad de Argentina para sostener estrategias diplomáticas de largo plazo. Si bien no es la primera vez que vemos la agenda de política exterior siendo opacada por la económica, recordando la figura similar de “superministro” que ocupó Sergio Massa durante la administración Fernandez, este tipo de decisiones convierten la Cancillería en un brazo político-financiero donde la lealtad ejecutiva y la adhesión al mandato presidencial son los únicos criterios de permanencia.

Te dejamos más información sobre el reordenamiento en Cancillería:


 “No Kings” en Estados Unidos

Luka Santiago Cuellar

En ciudades de todo el país, miles de ciudadanos se han volcado a las calles bajo el lema No Kings, o en español, Sin Reyes, expresando su descontento con la gestión del presidente Trump y exigiendo cambios urgentes en la agenda de gobierno. Las protestas han ocurrido en las principales ciudades del país, entre ellas, Nueva York, Washington, Los Ángeles, Connecticut, entre otras.

Lo que más llama la atención en las manifestaciones son los bailes, la música y los disfraces extravagantes, utilizados en tono de burla hacia Trump y su gabinete. Los organizadores han coordinado más de 2.000 eventos en todo el país, con una proyección de participación que supera los cinco millones de personas. La marcha se moviliza bajo el lema: “Sin reyes, sin tiranos”

La movilización se sustenta en los siguientes motivos de lucha:  principalmente es una crítica a las prácticas migratorias violentas, a la intervención militar en aquellos lugares gobernados por los demócratas, la dificultad y los retrasos en lo que respecta al acceso a la atención médica, el government shutdown  y los recortes de impuestos para los ricos,  entre otras cosas. El principal mensaje que se intenta transmitir es que hay un temor por la democracia, los derechos constitucionales y la libertad sobre la que se fundó alguna vez Estados Unidos. Muchos ciudadanos denuncian que el presidente exhibe comportamientos de corte fascista, una percepción reforzada por la reciente polémica en torno a la weaponization o militarización del gobierno. Según registros oficiales y testimonios, miembros cercanos a la administración Trump habrían actuado contra quienes consideran amenazas o enemigos, consolidando la idea de un poder cada vez más concentrado y represivo.


Las manifestaciones fueron percibidas por el gobierno como una amenaza, un intento de destruir al país. El gabinete presidencial las presentó como actos de odio hacia Estados Unidos y las ridiculizó calificándolas de “antiamericanas”. No Kings refleja un descontento generalizado y pone en evidencia las tensiones políticas y sociales que atraviesa Estados Unidos. Más allá de las críticas al gobierno, estas movilizaciones subrayan la importancia de la participación ciudadana y la defensa de la democracia en un contexto cada vez más polarizado.

Para saber más, te compartimos las siguientes recomendaciones: 


Cisjordania, ¿fractura israelí-estadounidense?

Iker Escobar León

Lo que se temía, no tardó en volverse la realidad: el alto al fuego del conflicto palestino-israelí no tardó en ser quebrantado, con acusaciones mutuas de Hamás e Israel. Mientras las tensiones se han concentrado en la franja de Gaza en los últimos dos años, Cisjordania vuelve al foco y no con buenas noticias. La amenaza israelí de una anexión de Cisjordania nubla las aguas. 

El miércoles, 22 de octubre, la Knéset israelí aprobó dos votaciones respecto a la anexión de Cisjordania, región simbólica del futuro palestino. La propuesta surge en torno al creciente apoyo internacional que recibe la propuesta de los dos Estados como solución al conflicto israelí-palestino. La votación rápidamente no fue del agrado de Estados Unidos, uno de los pocos aliados de Israel, donde el vicepresidente JD Vance y el secretario de Estado Marco Rubio se pronunciaron en contra de la iniciativa parlamentaria

“Se trata de una maniobra política muy estúpida”, en palabras del vicepresidente rojiazul. Por su parte, la presidencia americana expresó que no ocurrirá la anexión, pues prometió su apoyo a los países árabes, buscando la expansión de los Acuerdos de Abraham con Arabia Saudí, incluso amagó con la pérdida de todo apoyo estadounidense si ocurriese la anexión. 

Sin embargo, si algo ha dejado la experiencia en Gaza es que Israel es capaz de ejecutar cualquier decisión, no obstante, la pérdida de su único defensor debe suponer un replanteamiento estratégico para el Estado hebreo. En tanto, Estados Unidos se encuentra en un punto de quiebre: mantener su transigencia con Israel o recuperar el apoyo de los países árabes. Esta situación deja espacio a la teoría de juegos, aunque, ¿será esta amenaza suficiente para frenar el expansionismo israelí?

Te invitamos a leer el siguiente contenido de cara a las elecciones legislativas:


¡Día del Internacionalista!

El 24 de octubre se conmemoró el Día de las Naciones Unidas y evoca que un día como ese en 1945 entró en vigor la Carta de las Naciones Unidas. La ratificación de este documento constitutivo fue firmado por la mayoría de los 51 Estados Miembros, incluidos los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad. Así fue como nacieron oficialmente las Naciones Unidas, organización intergubernamental cuyas salas y pasillos han permitido sostener por décadas un mundo basado en la diplomacia multilateral y la cooperación internacional.

La ONU se ha adaptado a los tiempos y al ritmo de los cambios rápidos del sistema internacional. Pero a pesar de esos cambios, hay algo que ha permanecido estático: sigue siendo el único lugar en el mundo donde todas las naciones pueden reunirse, discutir problemas comunes y encontrar soluciones que beneficien a la humanidad. No existe otra organización internacional con la capacidad de convocatoria, ni la legitimidad ni el impacto normativo de las Naciones Unidas.

El resurgimiento de los unilateralismos ha puesto en juego la legitimidad de la ONU. Sin embargo, su esencia permanece: ser un foro donde el diálogo prevalece sobre la imposición, la cooperación sobre el conflicto y la diplomacia sobre la fuerza. En un escenario internacional fragmentado, el espíritu de San Francisco de 1945 sigue recordándonos que los desafíos globales —la paz, el cambio climático, los derechos humanos o el desarrollo sostenible— sólo pueden afrontarse mediante la acción colectiva.

Ser internacionalista hoy implica más que conocer las dinámicas del poder mundial: es asumir la responsabilidad ética de comprender, dialogar y tender puentes en tiempos de polarización. En nombre de Diplomacia Activa, celebramos a todas y todos los internacionalistas que, desde la academia, la gestión pública, las organizaciones civiles o los medios, mantienen viva la convicción de que un mundo mejor es posible si se construye con cooperación, empatía y humanidad.

¡Feliz Día del Internacionalista! Que la diplomacia siga siendo el lenguaje del entendimiento.

El mundo nos necesita atentos.


¿Llegaste hasta acá? ¡Gracias! En Diplomacia Activa respetamos la pluralidad de ideas, comprendiendo que el diálogo es la herramienta para encontrar puntos de conexión y construcción frente a las diferencias. Con este espíritu, aportamos a la libertad, la paz, la justicia y las instituciones sólidas. Apóyanos

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