Pandora Papers y Facebook: la correlación
En un día de descanso como cualquier otro, una tendencia apareció en Twitter sobre la revelación de una serie de documentos sensibles llamados “Pandora Papers”. Las cuentas de periódicos internacionales como El País, la BBC, The Guardian y The Washington Post se llenarían de artículos recién salidos de edición, tweets, reportes y videos interactivos que resumirían el proyecto y serían rápidamente compartidos para llamar la atención de miles de usuarios.

Los “Pandora Papers” son solo el último eslabón de una cadena de investigaciones que han puesto al descubierto redes de corrupción y lavado de dinero que envuelven a cientos de figuras públicas, de diversos ámbitos. Otras investigaciones han sido los Luxemburg Leaks (2015), Panama Papers (2016), Paradise Papers (2017) y los Archivos Fincen (2020).
Está bien, pero, ¿Qué son los Pandora Papers? Dicho por el propio Consorcio Periodístico; “Los Pandora Papers no es sólo una carpeta de investigación. Es todo un proyecto sin fines de lucro en donde colaboran más de 600 investigadores que conforman el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ). En este revelan archivos sobre paraísos fiscales, secretos sobre lavado de dinero y los tratos hechos de entre más de 330 políticos y funcionarios públicos de alto nivel en más de 90 países y territorios. Aparecen desde embajadores y ministros, hasta celebridades de la cultura pop y el deporte, jefes de espionaje y distribuidores de armas”.

A pesar de la dura exposición de los datos generales sobre los Pandora Papers, las noticias no acabaron ahí. Ese mismo día, Frances Haugen, una antigua Directora de Producto que trabajó en Facebook terminaba de grabar una entrevista para “60 Minutes”, donde revelaría sus mayores inquietudes con respecto a investigaciones que reflejarían que Facebook no está siendo lo suficientemente serio sobre sus medidas para prevenir el odio, la violencia y la desinformación.
La divulgación de ambas noticias se habría vuelto coincidentemente curiosa y al día siguiente pensamos que sería un lunes laboral como cualquier otro, donde estaríamos listos para realizar tranquilamente nuestras tareas y deberes, pero nadie se esperaba que ese lunes, cerca de las 3:30 p.m. (GMT-0), cayera Facebook, y con él, WhatsApp e Instagram. Muchas personas que dependen de la gestión emprendedora de estas aplicaciones, no pudieron retomar sus actividades comerciales.
Periódicos como The New York Times y The Wall Street Journal no dedicaron espacio a nada de lo que acababa de suceder en su primera plana, hasta el día siguiente. Desde entonces, las primeras noticias resultaron ser que France Haugen había asistido a una audiencia ante el Congreso de los EE. UU. para presentar un testimonio en vivo sobre sus inquietudes hacia Facebook por las razones mencionadas anteriormente.
De forma esporádica, el resto de los periódicos estadounidenses ahora sí reportaban cómo cayeron las redes sociales y esto afectó a varios negocios de emprendimiento. También se reportaron noticias con respecto a las afectaciones financieras que esto traería para Facebook en sí mismo cayendo sus acciones hasta un 4.8% según Nasdaq. Ya para ese miércoles las difusiones se habían calmado.
Una semana después del caos, los Pandora Papers sigue dando de qué hablar. Las opiniones de los usuarios en las redes sociales se muestran en todo tipo de perspectivas: unos coinciden en que esto afectará directamente a Facebook y que no habrá vuelta atrás como pieza clave para proponer regulaciones legislativas sobre las redes sociales; otros están de acuerdo en que esto podría ser un principio fundamental para reformar legislaciones de los países que se han involucrado en los mayores actos ilícitos financieros de la historia; en un tercer lugar están quienes simplemente no creen que el revelar un expediente más logre cambiar algo que se viene practicando sin cesar desde hace más de una década.

Por lo tanto, ¿Qué es lo que pasará?
Pandora Papers traerá consecuencias para el escenario internacional y Facebook está en las mismas riendas. A pesar de que ambos sucesos pueden considerarse casualidades aisladas, la realidad es que están muy conectadas, ambas ponen de manifiesto una grave falta de regulaciones con la consecuente necesidad de aplicar nuevas regulaciones desde el ámbito jurídico.
Aunque por el momento no queda claro si habrá cambios concretos para ambos casos lo que sabemos es que, para el caso de los Pandora Papers, varios Congresos y departamentos de investigación financieros en países como Brasil, Ecuador y México ya han emitido peticiones para comenzar a investigar a las figuras políticas envueltas en este fenómeno mundial. Por otro lado, para Facebook Francis Haugen está siendo la juez moral principal tras haber revelado los “Archivos de Facebook”.
Es muy probable que por el momento muchas cosas sigan igual o incluso empeoren, pero poco a poco recae sobre todos nosotros trabajar y redefinir colectivamente la realidad que nos rodea, por eso decimos que el mundo nos necesita atentos.
Ingrid Selene Fonoy Díaz: Traductora Jurídica y Financiera, Universidad del Valle de México.
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